Saturday 9 April 2011

El cuento del hospital

Durante el tiempo que estuvo en coma no me animé a ir a visitarla. Y me pregunté constantemente si ella estaba haciendo esfuerzos para hacer que perdure ese sueño casi infinito, en el que seguramente, su otra realidad se había convertido en la única realidad.
Supe por un amigo que trabaja en el hospital que a pesar de que todos los exámenes estaban bien, ella no despertaba.
Sé que estuvieron sus padres, su abuela y sus amigos. Nunca faltaron los amigos y a veces faltaste vos.
Sé que su madre le peinaba la larga cabellera a diario y a veces aparecían sus amigas con un labial cherry y jugaban a que todo estaba bien. Que, a pesar de tener puesta la bata del hospital, parecía que todos los días tenía un vestido diferente y que de todos,  el color lavanda era el que mejor le quedaba.